En un espectacular desfile por las principales calles de la localidad, dónde se mezclo el baile, las máscaras y la música, Xantolo conquistó al público charquense, en el segundo día de su presentación ñ, en homenaje a los que ya no están entre nosotros.
La esencia del Xantolo impregnó las calles del pueblo minero, dejando una estela de luz y de fiesta a lo largo de su recorrido con una magnífica exhibición de los sones huastecos que maravillaron a los asistentes.
Uno de los momentos más emotivos de la fiesta de las Ánimas, fué cuándo en la ofrenda ubicada a un costado de la parroquia de San Francisco de Asis, los integrantes de la comparsa de Los Huehues, pidieron permiso al más allá para ofrecer su ritual, lo que convirtió a la plaza de San Francisco en un espacio de cultura y tradición, de los pueblos huastecos.
El día de hoy Xantolo en Charcas llega a su fin, logrando unir con su cultura a dos pueblos hermanados por medio de la fiesta de las Ánimas.