José Rosario Mendoza
Los orígenes de la celebración del Día de Muertos en México son anteriores a la llegada de los españoles. Hay registro de celebraciones en las etnias Mexica, Maya, Purépecha, Náhuatl y Totonaca, que datan dese hace más de 3 mil años.
El Día de Muertos es una celebración mexicana de origen prehispánico que honra a los difuntos el 2 de noviembre, comienza el 1 de noviembre, y coincide con las celebraciones católicas de Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos.
Esta tradición ha continuado viva, gracias a planteles educativos, instituciones gubernamentales y personas que muestran interés por llevar a cabo actividades relacionadas con el tema y desarrollan Concursos, Exposiciones, Desfiles y Altares que tradicionalmente se erigen en escuelas, parques, oficinas públicas y hasta en las casas habitación.
Los Altares.
Dentro de esta tradición mexicana, el altar de muertos es el principal elemento, para las celebraciones. El punto angular de esta tradición, es la creencia de que el espíritu de los difuntos, regresa del mundo de los muertos a este, para convivir con sus familiares durante un día, departiendo con ellos, consolándolos y confortándolos ante su pérdida.
Importantes son los niveles que contendrá el altar: El de dos niveles representa el cielo y la tierra, el de tres, representa el cielo, el purgatorio y la tierra, y según la tradición azteca, al purgatorio le llamaban inframundo.
Los altares de siete niveles representan los siete escalones para llegar al cielo, al purgatorio o al infierno según la tradición católica.
Lo que hay que tener para un Altar
Una diversidad de materiales y objetos se requieren para la conformación del altar de muertos, dependiendo de la región. En la nuestra.
Básicamente son utilizados los siguientes: Un retrato o varios retratos; deberán ser de la o las personas a quien se dedicara el altar; Flores de cempasúchil, que indicaran el camino del difunto; El papel picado, que representa la alegría festiva; Una cruz de Tierra: Para representar la fe (polvo eres y en polvo te convertirás); Cirios o velas que son señal de duelo si son morados, y si son colocados en forma de cruz, representan los cuatro puntos cardinales para que el ánima pueda orientar su camino.
También hay otros elementos que deben ser utilizados en el altar, como el agua los dulces, pan, alimentos, frutas y otras cosas como bebidas alcohólicas u objetos personales, mismos que todos deberán estar relacionados con la vida que llevara el difunto.