Matehuala, S.L.P.- El aumento de los índices de inseguridad, así como la disminución en los precios de cámaras y equipos de grabación en el mercado, ha propiciado un incremento en el uso de cámaras de vigilancia en casas habitación y comercios.
Cabe citar que, en últimas fechas dado el incremento en los índices delictivos en la ciudad, cualquier persona, de todos los niveles económicos, recurre al uso de cámaras y alarmas para proteger sus casas, comercios o bienes en general.
Tal es el caso del señor Alberto Rojas, dueño de una tienda de abarrotes quien dijo que no solo se cuida de los ladrones del exterior, sino que también el robo hormiga lo ha perjudicado considerablemente.
En este sentido dijo que se sorprendió al revisar las cámaras ya que esta práctica no tiene clases sociales ni edad, debido a que hay personas que no tienen necesidad y aun si roban, sin importar la cantidad o el costo ya que con la intención basta.
La efectividad de las cámaras de vigilancia está demostrada. Sin embargo, en medio de los resultados positivos surgen muchas dudas, debido a la privacidad de las personas y de quienes regulan estas empresas y que hacen con la información que obtienen de sus clientes.
