El Objetivo 16 busca forjar sociedades pacíficas, justas e inclusivas en todo el mundo. A través del fortalecimiento de las instituciones y la promoción del acceso a la justicia, nos enfocamos en crear entornos seguros y respetuosos para todos, independientemente de su origen étnico, religión u orientación sexual. En 2022, la violencia en conflictos, como la guerra en Ucrania, incrementó dramáticamente las muertes de civiles, resaltando la urgencia de actuar. Frente a esto, es vital colaborar a nivel global y local para promover la paz y mitigar la inseguridad. La participación de gobiernos, sociedad civil y comunidades es esencial para abordar y resolver conflictos de manera efectiva. Reducir la violencia, combatir la corrupción y limitar el tráfico de armas son pasos cruciales hacia un futuro más pacífico y seguro. En nuestro país, el Objetivo 16 resuena especialmente, enfatizando la importancia de la paz para el desarrollo socioeconómico y la necesidad de un acceso equitativo a la justicia para proteger y garantizar los derechos de todos. Si no se toman medidas, la violencia y la inseguridad continuarán obstaculizando el desarrollo y profundizando las divisiones. Es hora de unir fuerzas para crear un ambiente de respeto y seguridad que permita a cada individuo prosperar.